Hoy me puse a leer la columna del gran Dr. Herbella que escribió para Perfil.
Tengo un enorme respeto por el tipo. En su tiempo y hasta el dia de hoy, promueve la idea de poder tener una educación terciaria y a la vez ser atleta profesional. No podría estar más de acuerdo con el tema. Ahora, en cuanto a su opinión sobre la privatización del fútbol, no podría discrepar más con el.
Le molesta mucho esta frase del propietario del Fulham:
“No me veo tanto como el dueño, sino como el custodio del club en nombre de sus hinchas”. Shahid Khan, multimillonario paquistaní, primer dueño del Fulham (Inglaterra).
Piensa que lo dueños privados vienen a apropiarse de lo que “es nuestro”. Perdón pero el fútbol hoy en día está muerto. Nadie puede sentirse dueño de este fútbol porque hoy día no lo maneja nadie. Vive como un parásito del gobierno solo porque son sociedades civiles y por ende responsabilidad nuestra. Osea, no es nuestro, es algo que vive gracias a nuestros impuestos eso sí, pero por obligación.
En su nota, le parece doler mucho aceptar que el fútbol es un negocio. Usa la analogía de Adan mordiendo la manzana, como si fuese tan horrible que unos privados muerdan de la fruta del fútbol.
“…Y llegó el día en que el Hombre aprendió a ganar dinero con los partidos y, a partir de ahí, cuando mordió la manzana, todo cambió.
Muy vivo metió la palabra clave -“buitres”. Con esa ya te ganás la parcialidad anti-corpo.
“Camuflados en el escenario convulso de reuniones frenéticas, pretemporadas sumamente austeras, retrasos salariales y un mercado de pases enmagrecido, se esconden los buitres de las Sociedades Anónimas (SA)”
A los hombres del negocio siempre se los mira con mal por ser codiciosos. Pero esa ambición, eufemismo de la codicia, hace que siempre van a querer lo más rentable para su club.
La NFL hizo 13.300 millones este último año, gracias a una pasión que se llama el fútbol americano. Manejado hasta el hueso por privados (excepto Green Bay Packers), la NFL consigue hacer un deporte nacional, unos de los mejores negocios del país del norte de América. Por ende, en vez de tener una actividad que tenga que ser sostenida por el estado, la actividad misma retribuye al estado ganancias. Solo con ese argumento deberías aceptar que privatizar un deporte es la mejor vía.
Pero bueno, es otro deporte. Miremos entonces las otras ligas, como hace el Dr. Herbella en su nota. Él escribe:
“La Premier League sufrió una brutal transformación en los últimos treinta años donde el “producto” se encareció y la concurrencia al estadio se tornó un privilegio de la clase adinerada.”
Habla de brutal transformación de una manera peyorativa. La premier league es la liga más vista en el mundo gracias a esa brutal transformación. Es un producto que hizo que NBC desembolse 100 millones de dólares por año a cada club de primera. Luego entramos en la misma historia de siempre que el futbol se encareció para favorecer la clase adinerada. La realidad es que las canchas se llenan, y los hooligans no están más. Osea estás criticando que no hay más violencia y que aún sin estos apasionados estas haciendo un futbol rentable. Además ojo, no sé si está al tanto pero las canchas del futbol argentino no se llenan más. Y la mayoría que van, son barras sostenidos por los dirigente que tanto quiere.
Igual, parece que justamente eso no quiere:
“Cuando las instituciones tienen dueño se alejan de los intereses de la comunidad y se focalizan en la rentabilidad.”
¿Para qué forzar esa identidad de institución social? Es una falacia pensar que el club desaparece solo porque llega satanás y sus amigos empresarios. Para los críticos parece que ser un parásito del estado es más viable que crear una empresa rentable que aporte con sus impuestos al estado.
Este último párafo es tajante. Que fácil usar palabras como pasión y sentimiento. En el fondo es todo verso. Tu argumento no puede ser válido si vos te construís tu idea a base de intangibles como la pasión y el sentimiento. No seamos tan románticos con algo que ya no queda ni cabeza. Antes con Don Julio se manejaba como una mafia el fútbol. Era todo surreal, una creación de ellos. Ahora que no está más aprovechemos y erradiquemos esos parasitos que quedaron.
Asi que sí, dejame terminar como el Fulham. Custodiame la guita del estado, así sé que mis impuestos no van a estos mafiosos. Mi sentimiento, mi pasión no va a cambiar. La manzana podrida, es la que nos vamos a tener que comer si esto sigue así. Dejemos de lado esas analogías baratas, y la visión que los clubes de fútbol son la respuesta para el bienestar social de nuestra comunidad. El fútbol no es una necesidad de todo argentino, pero sí es una actividad que puede ser altamente rentable si se la toma como tal. Si los dirigente del futbol actual le tienen miedo a la privatización, será porque no quieren perder ese lugar que se les dio, de una manera ilegítima, a fuerza de las políticas que ya conocemos.
Les recuerdo ese número, 13.300 millones de dólares en un año. Y no fue magia, fue hecha rentabilizando esa misma pasión de la que habla el Doctor. Claramente custodiaron bastante bien ese sentimiento, hasta se llenaron los bolsillos así, que tragedia.
~Presi